Hace un tiempo, el dueño de un centro de Terapias Alternativas, se interesó por mi forma de trabajar, así que nos citamos en su local. La mejor forma para mi de explicarle era que probara en él mismo.
Enseguida empezaron a aflorar bloqueos de su infancia. En su niñez quedaron grabadas las continuas discusiones entre sus padres.
Este tipo de relación se repitió en su primer matrimonio, durante años así que ambos decidieron romper ese lazo. Pero la relación con su hija se distanciaba más de lo que él hubiese querido. Al ser ella pequeña, supongo que entendía la falta de contacto con su padre. Él estaba enfadado con su ex mujer, porque parecía ser la responsable de esa situación.
El caso es que seguíamos con la terapia, mientras él descifraba los laberintos de sus miedos e insatisfacciones.
Volvía a tener una pareja y un bebé, pero seguía habiendo una tristeza interior, porque sabía que ese sentimiento lo acompañaba desde que tenía uso de razón. Había cambiado de pareja, de trabajo, de casa...pero veía que empezaban otra vez a repetirse las mismas pautas.
Después de un largo rato en el que indagar más sería forzar la sesión, pude asomarme al desasosiego, la tristeza, el anhelo, el arrepentimiento, pero sobre todo, pude sentir algo difícil de describir, y que, desde luego, no olvidaré jamás. Sentí, en palabras mayúsculas EL VACÍO QUE DEJA LA FALTA DE PERDÓN Y QUE NOS LLEVA A UN ABISMO DE TRISTEZA Y SOLEDAD. ESTA SENSACIÓN RESONABA DEMASIADO FUERTE, COMO SI MUCHAS DE LAS PERSONAS QUE HABITAMOS ESTE PLANETA LO USÁRAMOS COMO EXCUSA PARA DEJAR DE VIVIR NUESTRAS VIDAS, OCUPÁNDONOS DEMASIADO DE CAMBIAR EL PASADO Y A LOS DEMÁS.
Hay más soluciones, y una de ellas es buscar en el baúl de las ilusiones, alguna de las miles que hemos dejado en el camino. Respirar hondo, y tener el valor de empezar a ser honestos con nosotros mismos.
Gracias a todos los que os prestáis a que conozca estas sombras, que también habitan en mi y que en la luz pierden su fuerza.
M.C.P.G.2017
Comentarios
Publicar un comentario
Si te apetece comentar algo o preguntarme, suelo responder en poco tiempo.