Una cosa está clara, o, desde mi punto de vista, experimento más conscientemente cada día, y es que: es mejor estar atento a qué pensamos y sobre todo, cuáles son los límites de nuestro concepto de pensamiento y para qué centramos el poder de todo lo que pasa en nuestra vida en alguien de fuera, o en algo. Así, que a partir de este mismo instante te invito a hacer pequeños experimentos diarios con tu vida. A ver y sentir cómo estos pequeños cambios producen un efecto a tu alrededor. Estar donde estás en cada momento y con quien estés, me parece, de entrada un respeto al momento, a tu elección y, a la(s) personas que te acompañan en ese instante. Ver que las circunstancias que te han llevado a esa situación no te obliga a vivirla, y que si lo haces, eres quien decide en última instancia la actitud ante la misma. Así que, estés donde estés, disfruta lo mejor que sepas, porque si no, es como tirar continuamente los minutos de regalo que recibimos cada día. Ate
La diferencia en los resultados está en tus pensamientos. Si estás más atento a ellos, descubrirás tu programación mental y hábitos emocionales. Un enigma dentro de ti, que a tu ritmo, puedes ir descifrando.