Nuestro cuerpo está formado por diminutas moléculas a nivel cuántico, que están en continua vibración. Si estas entidades cuánticas están sometidas a mucho nivel de estrés, os imagináis cómo influye en nuestro cuerpo físico, ese que nos sirve de vehículo, y al que intentamos cuidar y no sabemos las causas de su deterioro, cansancio, y menos aún, de lo que nos quiere decir con su lenguaje. Por supuesto que ninguno de nosotros creo que vivamos en un paraíso donde todo es una imagen perfecta de calma, paz, tranquilidad y donde todo lo que se mueve alrededor concuerda con nuestros esquemas. Pero qué aburridas serían nuestras vidas si siempre estuviéramos contemplando la misma fotografía. En cierto modo, estamos absortos en buscar una imagen de quietud y, por el camino nos perdemos muchas cosas importantes, paisajes distintos, personas maravillosas, "te quieros " perdidos en el reloj, besos rápidos sin sentido. Deseosos de que llegue el Viernes y q
La diferencia en los resultados está en tus pensamientos. Si estás más atento a ellos, descubrirás tu programación mental y hábitos emocionales. Un enigma dentro de ti, que a tu ritmo, puedes ir descifrando.