Efectivamente, pero hasta qué punto estamos dispuestos a llegar, a qué o quién estamos dispuestos a renunciar. Lo gratificante de la respuesta es que la clave y solución no están fuera, sino dentro. Lo espectacular de este juego de autoengaño es que nos hemos vuelto muy inteligentes a la hora de buscar excusas para llevar una vida más acorde y en armonía. Pero, desde luego, hay un interés tanto personal como a otras escalas para que estemos continuamente moviéndonos en un círculo agotador, como el hamster enjaulado que repite lo mismo: mover una rueda, para gastar un poco de energía, y así, desempeñar su trabajo. No hay mucha diferencia entre estos animalitos y nosotros. Sólo que el miedo a la libertad, a vivir y experimentar nos deja anclados a una vida de ilusiones transitorias, de forma que vamos dejando lo verdaderamente importante para adelante, para mañana, para los que vienen detrás, y así nos apagamos, enfermamos y seguimos confirm
La diferencia en los resultados está en tus pensamientos. Si estás más atento a ellos, descubrirás tu programación mental y hábitos emocionales. Un enigma dentro de ti, que a tu ritmo, puedes ir descifrando.