Supongo que he estado demasiado tiempo sintiéndome responsable de lo que a continuación voy a contaros.
Al principio, de mis cursos de kinesiología todo iba muy rápido, aprendía muy fácilmente, mi intuición estaba muy desarrollada, mi forma de ver las cosas había cambiado por completo. Practicaba con mis abuelas, padres,hermanos y sin ninguna barrera ni miedo, comencé a trabajar por los alrededores.
Además coincidía que estaba a punto de terminar mis estudios. Me había dejado algunas asignaturas repartidas en convocatorias distintas y compaginaba los exámenes, con la kinesiología y seguía haciendo mi vida. Evidentemente después de haber pasado unos años maravillosos en Cádiz, donde cursé Ciencias del Mar, y de haber pasado los dos últimos veranos dando clases de tenis, fui consciente de que trabajar de sol a sol fue el detonante que me ayudó a conocer de primera mano cuán difícil era ganar dinero y decidí matricularme de todas las asignaturas que me faltaban para terminar la carrera, de forma que asistí a todas las clases teóricas y prácticas para así pasar mi último año viviendo en Cádiz.
Un par de años antes, conocí al protagonista de mi historia, era amigo del novio de una compañera de piso. Reunía una serie de cualidades muy atractivas para mi. Salíamos en grupo, jugábamos al squash, dimos algún que otro paseo en su moto...
El caso es que cuando ya me encontraba en La Línea y tenía que volver a Puerto Real a examinarme ( mi Facultad está allí), mi amigo Jose Juan no tenía inconveniente en ofrecerme su casa y yo pasaba dos o tres días allí mientras hacía los exámenes. Para esta ocasión, en concreto, era Septiembre y ya había hecho mis cursos de kinesiología holística y como era algo maravilloso para mi, me gustaba compartirlo
Un día José Juan me pidió que le hiciera la terapia. Ya me había contado que le pasaban cosas extrañas, que un amigo suyo, compañero de trabajo, que falleció en una accidente, parecía que le susurraba al oído. Y es que siempre queda ese recuerdo de alguien a quién has apreciado. El caso es que en un momento determinado de la terapia, José Juan me dijo, -¿qué es esta cosa amarilla, como una luz, que veo por aquí? y dolorosamente, oí una voz en mi interior tan clara y que aún la recuerdo perfectamente y que decía- SE LE VA LA VIDA!!! . Todavía me emociono al recordarlo.
Claro que dudé de mi, tanto, que no pude decirle lo que había oído. ¿Qué hacer al respecto? Era un amigo, yo una principiante...qué difícil.
Terminé mis exámenes y comenté lo que me pasaba a mi pariente de la herboristería, a la persona que me enseñó, era algo que no me podía callar.
En esa época a J.J. como yo lo llamaba, lo operaban del menisco, y estábamos en contacto, yo le decía que bebiera mucha agua para eliminar la anestesia.
Aunque no teníamos ninguna relación establecida, hablábamos por teléfono de vez en cuando, nos felicitábamos la Navidad.
Estaba yo pasando unas días en Granada, cuando me enteré de que los tres exámenes que había hecho en la Convocatoria extraordinaria de Enero, los había aprobado y por lo tanto, y después de muchos años de estudio, terminé Ciencias del Mar. Recuerdo que lo llamé para contárselo y evidentemente me felicitó. Un tiempo antes me preguntó qué le había salido en la terapia y yo sólo le dije que tuviera cuidado con la moto.
Yo siempre he intentado dejarme llevar por los impulsos. Una noche, recuerdo que iba a llamarlo pro teléfono, y mi madre, con todo su amor, simplemente me comentó que a ver si dejaba de ser yo, siempre la que llamara, que podía dejar que fuera él.
Dejé mi intuición a un lado, lo que yo sentía, por lo que debía.
Recuerdo que bajé a tirar la basura y cuando pensé en él sentía como si de pronto mis pies se metieran en un fango y me cubrieran con una capa protectora. No le di mucha importancia. Era de noche, Enero, y hacía frío.
A la mañana siguiente sonó el teléfono, era mi amiga Luisa, decía: Mari Carmen no te asustes, José Juan ha tenido un accidente, no recuerdo, nada más sólo que había donado las córneas....NOOOOOOOOOOO....NOOOOOOOO....... ¿por qué?,
Que emocionante
ResponderEliminarGracias
Eliminar